El promedio de horas de trabajo de un parto para mamás primerizas puede ser eterno, de 6 a 12. Sin embargo, hay maneras de ayudar a tu labor de parto con ejercicios que le darán tono y elasticidad a los músculos involucrados en el proceso. Aquí te decimos qué ejercicios te pueden ayudar pero antes de realizarlos es muy importante que consultes a tu médico y le preguntes si estas en condiciones de realizarlos.
Ejercicios Kegel
Los ejercicios Kegel son contracciones musculares para fortalecer el suelo pélvico los cuales dan soporto al útero y la vejiga. Es un ejercicio muy sencillo que no requiere mayor esfuerzo. Primero ubica los músculos. Los músculos del piso pélvico son internos. Cuando orinas y logras detener el flujo, estás usando los músculos del piso pélvico. Antes de realizar los ejercicios vacía tu vejiga completamente. Una vez hecho esto, contrae los músculos por tres segundos, luego relájalos por tres segundos más. Repite este ejercicio entre 10 y 15 veces por sesión. Intenta hacerlos tres veces al día.
Ejercicios de inclinación de la pelvis
Estos ejercicios fortalecen los músculos del estómago ayudando a aliviar el dolor de la espalda baja durante el trabajo de parto. Ponte boca abajo en tus rodillas y manos, separando rodillas y manos a una distancia similar a la de tus hombros. Despacio inhala, mientras inclinas la cabeza hacia abajo y arqueas la espalda hacia arriba, luego expira al meter la espalda hacia abajo (hacia el suelo) y levantar la cabeza.
